Pues eso, que el fin de semana pasado estuve con unos amigos en Segovia y lo pasamos en grande, tanto como lo es el acueducto, que de lejos no parece tan grande...pero cuando te pones debajo te deja boquiabierto.En Segovia es obligado comer cochinillo, al menos por una vez, y eso hicimos...la verdad, donde esté el cordero asado de mi santa madre que se quite el cochinillo de Segovia y el de todas partes, eso si que es un manjar que todos deberíais probar.
En otro orden de cosas, ya tenemos nuevo compi de piso, se llama Jorge es futbolista de profesión (juega en el Alcobendas) y es un tío cojonudo, mejor compi no nos podía llegar.
En el curro bien, muchísimo trabajo, pero lo llevo estupendamente, voy feliz todos los días al trabajo y eso no todo el mundo lo puede decir, espero poder decirlo durante mucho tiempo.
Y ahora, que ya escucho de fondo la sintonía de Plutón, dejo esto aquí y voy a ver como acaba el capítulo de Drungon y a ver que tal queda el tiroteo que me curré para el final del capítulo.
Hasta la próxima. Abrazotes para tod@s!!
1 comentario:
Pues no! Cuanta razón tienes! Poca gente va contenta a trabajar cada mañana! Hay que seguir el instinto y hacer lo que uno desea! que vida solo hay una! Felicidades!
Ah! y la cocina de tu madre mejor no la compares con nada... pq no tiene ribal
Besos a toda la familia al completo: papis, tatas/r, cuñis, sobris, primos....
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